Las enfermedades de las encías como la gingivitis son bastante comunes en la población española. Según numerosas encuestas de salud bucodental, el 75% de la población sufre problemas de encías, por lo que es importante saber cómo tratarlas a tiempo.
¿Por qué se produce la gingivitis?
Una de las causas más importantes de la gingivitis es la placa bacteriana. Normalmente empieza con una inflamación de las encías. Esta primera fase, es muy importante. Si vemos estos síntomas y no se trata rápidamente, es muy probable que termine en una periodontitis, una infección de la encía y del resto de tejidos que sustentan el diente. En su estado más avanzado, se pueden llegar a perder piezas dentales, incidiendo en tu salud general, como ya hemos comentado en anteriores posts.
¿Cuáles son los síntomas de una gingivitis?
Si reconoces estos síntomas en tus encías, durante un periodo de tiempo, casi habitualmente, deberías acudir a tu dentista de confianza para una revisión rutinaria.
- Si te sangran las encías durante un periodo de tiempo. ¡Cuidado! Este es un síntoma de que algo ocurre en tus encías.
- Cuando tienes sensibilidad dental a la más mínima.
- Notas un mal sabor de boca o de aliento.
- Tus encías están de un color rojizo, inflamadas y te duelen.
- Cuando tus encías empiezan a retraerse, puedes ver claramente las raíces de tus dientes, e incluso notas movilidad en ellos. Este último síntoma se presenta cuando la enfermedad está avanzada.
¿Qué produce la gingivitis?
La genética influye. Si tus padres han sufrido o sufren enfermedades de las encías, en los tejidos epiteliales y conectivos, o deficiencia de las proteínas que se ocupan de regular las funciones de las células que las producen.
- Si estás embarazada, puedes ser más propensa a sufrir gingivitis. Los famosos cambios hormonales pueden ser la causa.
- El tabaco es una de las causas más probable de enfermedades de las encías. No fumes si sueles tener sangradados en tus encías. Tu sistema inmune te lo agradecerá.
¿Existen tipos de gingivitis?
Sí, dependiendo del grado de inflamación, sangrado o movilidad dental, cuando la enfermedad se encuentra en una fase avanzada, se puede dividir en dos fases:
- Crónica: Cuando se suele tener mucho sarro, acumulándose en grandes cantidades en la encías. Con el paso del tiempo, la gravedad de la gingivitis aumenta. Aquí es muy importante la higiene bucodental, cepillarse los dientes diariamente y usando el hilo dental para eliminar restos de comida de las encías.
- Agresiva: Cuando se pierde la encía y se destruye la parte ósea del diente. Aunque esta fase parezca que no tiene remedio, sí la tiene. Hay distintos tratamientos de mejora, que pueden parar este momento de la enfermedad.
La prevención y el tratamiento adecuado de la gingivitis está en tus manos. Si notas estos síntomas o crees que estás en riesgo de padecerla, nuestro consejo es que acudas a tu dentista para una revisión. Y no descuides tu higiene bucodental, el cepillado y el hilo dental, son definitivamente, tus mejores aliados.
Fuente: La Vanguardia
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