Hoy en día acuden a nuestra consulta pacientes con dudas acerca de las muelas del juicio. Sobre todo referentes a si es necesario, o no, su extracción debido a que pueden generar un apiñamiento que llegue a mover los dientes incisivos inferiores.

Lo primero que hay que saber es que las muelas del juicio, cordales o terceros molares, suelen comenzar su erupción alrededor de los 18 años de edad siendo, los últimos molares, en hacerlo. Las muelas del juicio pueden erupcionar, completamente, como una muela normal o quedarse enclavadas, a medio erupcionar, y permanecer así mucho tiempo o incluso definitivamente.

¿Las muelas del juicio pueden producir apiñamiento?

En ocasiones, el cordal no encuentra espacio suficiente en la boca y, entonces, sale torcido, pudiendo llegar a causar daño al siguiente molar. Pero está demostrado, con distintos estudios que, contrariamente a la creencia popular, la presión de las muelas del juicio no llegan a mover los dientes delanteros, ya que para ello tendrían que desplazar todas las demás piezas dentarias. Por lo tanto, el apiñamiento que ocurre en los dientes incisivos inferiores a lo largo de la vida está relacionado con las fuerzas de crecimiento óseo.

Lo cierto es que las muelas del juicio casi nunca cumplen una función masticatoria útil, de hecho, están en regresión; es decir, cada vez hay más personas que nace sin las muelas del juicio formadas, ya que la naturaleza tiende a eliminar aquello que no es útil y no se usa.

Un problema añadido en los cordales es, que debido a su posición en la arcada dentaria, suele ser difícil su higiene y, en ocasiones, aparece inflamación de la encía e, incluso, mal aliento.

¿Cuándo hay que quitar las muelas del juicio? 

Hay que valorar cada caso de forma individual. La mayoría de las veces es muy útil la realización de una radiografía panorámica digital que nos informe sobre la posición del cordal y del espacio disponible. Por lo general, cuando el cordal tiene espacio suficiente, sale en la posición correcta, y no presenta grandes lesiones de caries, aconsejamos su mantenimiento, haciendo especial hincapié en realizar una buena higiene de la zona.

Por el lado contrario, cuando el cordal está inclinado, no tiene espacio para erupcionar en una correcta posición, o presenta grandes destrucciones por caries, recomendamos su extracción para evitar que pueda producir infecciones o dañar al siguiente molar.

¿Duele mucho quitar las muelas del juicio? 

Es molesto y durante los días siguientes a la extracción tendrás algunas molestias que podrán alargarse en función del tipo de muela y de cómo se desarrolle la cirugía.

También conviene recordar que el dolor, por sí solo, no es síntoma suficiente para indicar la extracción y que cualquier pieza dentaria, al erupcionar, produce dolor, por lo que recomendamos una valoración previa por tu dentista.

Si tienes cualquier duda, o tienes problemas con tus muelas del juicio, no dudes en pedir cita con nosotros. Estaremos encantados de poder atenderte. Recuerda, la primera visita es siempre gratuita.